¿Qué es el foro?

Para realizar esta tarea, un amplio, comprometido y pluridisciplinar equipo humano comenzó llevando a cabo trabajos de investigación histórica y arqueológica que continúan actualmente.

La actividad prioritaria fue la identificación de fosas comunes, búsqueda de desaparecidos y exhumación de los restos para su identificación e investigación de los sucesos que llevaron a su desaparición y enterramiento ilegal. Entonces ya entendimos que la recuperación de la memoria era un proceso de justicia y, por tanto, consideramos imprescindible que se involucrara el poder judicial español en el proceso de recuperación física de los restos y de resarcimiento de las víctimas. Nunca creímos en las acciones personales o voluntariosas de dudoso protagonismo, sino en la aplicación de la justicia como un derecho fundamental e imprescindible en un Estado democrático.

Por esta razón, trabajamos este asunto tan importante y preferente a partir de un protocolo integral elaborado por la propia asociación, hasta la aprobación de uno institucional tras la entrada en vigor de la ley 52/07 o de Memoria en diciembre de 2007.

Y en ese sentido, desarrollamos con más intensidad esta labor desde el año 2004, con la primera acometida en Otero de Herreros, Segovia, hasta el año 2014, en el cementerio de Alhama de Granada.

En paralelo a ello, y también con vocación de ir cumpliendo los fines fundacionales de manera coherente, completa y total, desarrollamos una serie de trabajos, que se han ido ampliando con el tiempo hasta la actualidad, que van desde las escuelas de memoria, a homenajes, charlas, divulgación de materiales y participación en cuantas plataformas reivindicativas unitarias apuesten por la reparación de las víctimas de la dictadura, la aplicación de los derechos humanos, la justicia y la investigación y el conocimiento y difusión de la verdad.

También, la promoción, entre las administraciones, de reivindicaciones, proyectos y acciones que desarrollen manifiestamente políticas de memoria democrática que mejoren la convivencia y fomenten y garanticen la no repetición de procesos involucionistas, excluyentes y discriminatorios. En definitiva, hacer pedagogía de nuestra memoria, como hecho social que supera todo ámbito personal y familiar, como elemento imprescindible para la reconstrucción democrática de nuestro país y el mantenimiento de valores como el pluralismo, la tolerancia y la libertad.

Nuestra Asociación tiene ya un largo camino en la lucha por la recuperación de la memoria de nuestro país, siguiendo los criterios internacionales de protección de los DDHH, que superan cualquier marco judicial o administrativo nacional.

Como hemos señalado, judicializamos las exhumaciones con restos de desaparecidos y hemos exigido la nulidad de los procesos y las sentencias de los consejos de guerra y otros tribunales franquistas.

Creemos que no existe otro camino que el de combatir la revisión histórica que padecemos porque es una necesidad higiénica para una sociedad avanzada; es necesario que los jóvenes españoles y europeos tomen conciencia, conozcan la verdad del pasado y no apuesten por ninguna farsa, porque ello les puede llevar a repetir una nueva tragedia destructiva.